Guardia Civil y tatuajes: del divorcio a la reconciliación
Guardia Civil y tatuajes: del divorcio a la reconciliación

Guardia Civil y tatuajes: del divorcio a la reconciliación

Hasta hace poco tiempo, te podías enfrentar a un verdadero dilema existencial en el momento en que debías elegir entre ser un auténtico amante de la tinta y tu vocación de ser guardia civil. ¡Qué difícil decisión ante tal pugna de deseos!

Por una parte, podías optar por mantener tu cuerpo cual lienzo en blanco o decidirte por un tatuaje discreto a la vista de los demás para que no te pudieran echar hacia atrás en las pruebas selectivas. La otra alternativa que tenías era hacer de tu cuerpo una completa obra de arte sin importarte la ubicación o la visibilidad, pero, a cambio, renunciabas a ingresar en la Benemérita. Era un divorcio en toda regla entre los tatuajes y este cuerpo uniformado.

Ahora, las circunstancias han cambiado, es tu momento y ya no tienes excusas para opositar. La Guardia Civil y el mundo del arte corporal se han reconciliado.


Soy amante de la tinta y guardia civil


El 8 de noviembre de 2021, salió publicado el Real Decreto 967/2021 por el que regula el uso general del uniforme de la Guardia Civil y aquí te damos los puntos clave para que los tengas en cuenta:

– Los tatuajes están prohibidos si incluyen expresiones o imágenes que sean contrarios a los valores constituciones, la disciplina o la imagen de la Guardia Civil

– Se permiten los tatuajes en zonas visibles vistiendo el uniforme salvo que contraríen el punto anterior

– Se prohíben las argollas, espigas, inserciones, automutilaciones, pegatinas, dilataciones y similares, los implantes microdermales y perforaciones diferentes a las destinadas para el uso de pendientes siempre y cuando sean visibles al vestir la uniformidad del cuerpo

Por fin, la tradición tan vinculada a la Guardia Civil se va aunando a la modernidad sin perder de vista ni su identidad, ni su esencia ni tan siquiera ese espíritu de entrega a los demás tan característico de este cuerpo.


¿Os imagináis al Duque de Ahumada engalanado con tatuajes? Para nuestro deleite, tendríamos una imagen rompedora…


Dra. Mireia Company Alcañiz.